BRUSELAS.- Miles de personas se manifestaron hoy en Bruselas para exigir una
mejora de las condiciones laborales del sector público y por la
elaboración de un nuevo pacto social, en una movilización organizada por
los principales sindicatos del país.
La marcha fue organizada por
sindicatos del sector "no comercial" (sanitario, social, cultural y
otros vinculados al sector público), unidos bajo un "frente común
sindical", y surge como rechazo a las medidas de austeridad tomadas por
las distintas administraciones belgas.
"Las condiciones de trabajo
son demasiado duras y los salarios son cada vez más bajos. No hay
suficiente gente, reclamamos más personal con mejores condiciones
laborales", explicó el responsable nacional del sindicato social
CNE, Yves Hellendrof.
Para Hellendrof, es necesario movilizarse
contra los "ataques del Gobierno" y reclamar acuerdos sociales
"positivos", a la vez que advirtió de que si no se establece rápidamente
un calendario de negociación "haremos huelgas en las instituciones".
Representantes
de los distintos sindicatos se reunirán paralelamente a la marcha con
el Gobierno federal y con los regionales de Valonia-Bruselas y de
Flandes, a los que trasladarán sus exigencias concretas para cada
administración.
"Hemos llegado al límite. El empleo, el poder
adquisitivo y el equilibrio entre lo público y lo privado son el eje de
nuestras exigencias y pedimos progresos para negociar acuerdos sociales
justos que acaben con la austeridad", dijo Christian Masai, director
federal del sindicato socialista SETCA.
Los sindicatos
reivindican, entre otros puntos, derecho a tomarse tres semanas
consecutivas de vacaciones al año, planes sectoriales de lucha contra el
síndrome del trabajador quemado (burn out), contratos más estables en
las administraciones públicas, horarios estables y previsibles o derecho
a tres días libres al año para asuntos propios.
"A nivel federal,
no sólo vemos que no hay intención de mejorar las condiciones laborales
y los salarios, sino que se están aplicando programas de jubilación
desastrosos para los trabajadores más antiguos", explicó a medios
locales el responsable del sector del sindicato CGSLB, Eric Dubois.
Según
fuentes sindicales, acudieron a la manifestación más de 20.000
personas, mientras que medios locales cifran la asistencia en 10.000
personas.
En Bélgica, cerca de 525.000 personas trabajan en el
sector público "no comercial", que engloba a sectores muy diversos como
la sanidad, servicios sociales, educación o cultura, y supone el 15 % de
los empleos del país.
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