NUEVA YORK.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha defendido las medidas
que ha adoptado hasta el momento así como algunas que irá firmando en
los próximos días, entre ellas la de no entregar visados a los
ciudadanos que procedan de países que considera "con tendencia" al
terrorismo. Esta medida, que afecta a Irán, Irak, Siria, Sudán, Somalia,
Libia y Yemen, predominantemente musulmanes, podría ser una de las que
el mandatario republicano firme este fin de semana.
En una entrevista concedida a Fox News, la segunda que concede desde
que asumió el cargo de presidente el pasado viernes, Trump ha asegurado
que el FBI cuenta con unas mil investigaciones por terrorismo, todas
vinculadas a "personas a las que se dejó entrar" en el país.
"No
necesitamos esto. Algunas de esas personas vienen con malas intenciones.
Sé que muchos no, pero no podemos correr ese riesgo", ha señalado,
indicando que Washington ya ha permitido la entrada de "miles de
personas" de las que las autoridades no saben nada.
La orden ejecutiva, que podría firmarse el sábado, prohibiría a los
ciudadanos de los mencionados países obtener visado para entrar en el
país por un período de 30 días.
Desde enero de 2016, Estados Unidos
incluyó varios cambios impulsados por el Partido Republicano a su
programa de exención de visados, por el que se exime a ciudadanos de
determinados países de la obligación de solicitar visado para entrar en
el país.
En virtud de esta y de la legislación antiterrorista, a los
ciudadanos de países incluidos en la lista de participantes en este
programa -entre ellos, España- que hubieran pasado por estos siete
países, se les niega la autorización de entrada al país, por lo que para
recibir la documentación pertinente tienen que pasar el procedimiento
ordinario de quienes no están exentos de este requisito.
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos ha suspendido
de forma temporal los viajes de su personal destinados a llevar a cabo
entrevistas a refugiados en el exterior, según han confirmado dos fuentes cercanas a esta cuestión.
Esta decisión equivale, 'de facto', a una pausa en las próximas
admisiones de refugiados, ya que las entrevistas son uno de los pasos
más importantes en el procedimiento de consecución de estatus de
refugiado, un proceso que puede llegar a durar varios años.
Seguridad Nacional ha trasladado esta decisión a todos los implicados
en el proceso de solicitud de estatus, tal y como ha indicado una de
las fuentes, lo que significa que si bien no existe aún ninguna orden
ejecutiva que cancele de forma definitiva este programa, las próximas
admisiones de refugiados sufrirán más retrasos.
El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, ha asegurado a la prensa
que este viernes Trump podría firmar nuevos decretos, sin detallar la
naturaleza de los mismos, y entre ellos podría incluirse la prometida
prohibición de entrada de todos los refugiados y la suspensión de
visados para ciudadanos de Irak, Irán, Siria, Libia, Sudán, Somalia y
Yemen.
Trump ha comparado el muro que quiere construir con México con el que
Israel ha construido para separar a los territorios palestinos con la
intención de evitar ataques terroristas.
"El muro es necesario porque gente quiere protección y el muro
protege. Lo único que tienes que hacer es preguntar a Israel. Tenían un
absoluto desastre atravesando al otro lado", ha opinado Trump en una
conversación con un presentador del canal conservador Fox News.
Trump ha comparado, así, el muro israelí, criticado por aislar a
poblaciones palestinas, a su proyecto para levantar una barrera física
con México, el tercer socio comercial de los estadounidense, al que
Trump ha acusado de no hacer lo suficiente para luchar contra la
inmigración ilegal o el narcotráfico.
El presidente estadounidense aseguró que el muro israelí detiene al
"99,9%" de los cruces no autorizados y ese es su objetivo para su
barrera con México, que asegura que pagará por el coste de una manera
indirecta.
Trump también dijo que su barrera será "un muro en condiciones",
diferente al que ahora existe en gran parte del recorrido de la línea
fronteriza entre México y Estados Unidos.