domingo, 12 de febrero de 2017

La Fiscalía francesa matiza que aún no hay ninguna decisión tomada sobre Fillon


PARÍS.- La Fiscalía francesa ha asegurado este domingo que aún no se ha tomado ninguna decisión concreta sobre la investigación abierta contra el candidato presidencial conservador francés François Fillon tras la difusión de informaciones sobre la inminente adopción de nuevas medidas.

"No se ha tomado ninguna decisión en esta fase de la investigación y hasta hoy no se ha acordado ningún plazo", ha apuntado una portavoz de la Fiscalía, según recoge el periódico 'Le Parisien'.
El organismo responde así a una información publicada este domingo por 'Le Journal du Dimanche' que sostiene que la Fiscalía adoptaría nuevas medidas legales contra Fillon la próxima semana.
Las investigaciones contra Fillon y su entorno comenzaron a raíz de una información revelada por la revista 'Le Canard Enchaîné', que acusó a la mujer del ex primer ministro de cobrar 900.000 euros gracias a empleos que no ejercía, principalmente como asistente parlamentaria de su marido.
El escándalo ha mermado la popularidad de Fillon, de tal forma que ha pasado de favorito para las elecciones de abril y mayo a figurar tercero en intención de voto, por detrás de la ultraderechista Marine Le Pen y el centrista Emmanuel Macron.
Fillon ha pedido perdón públicamente a los franceses por el trasfondo ético de las contrataciones de familiares, pero ha insistido en que actuó de forma legal.

La fiscalía francesa prepara nuevos pasos en el caso de Fillon

PARÍS.- La fiscalía financiera de Francia tomará nuevas medidas jurídicas esta semana en su investigación sobre el presunto trabajo ficticio de la esposa del candidato presidencial Francois Fillon, informó el domingo un diario.

El Journal de Dimanche publicó informaciones de fuentes no identificadas que indicaban que el proceso involucraría tanto a Fillon como a su esposa británica Penelope.
No se logró contactar de inmediato con el fiscal ni con representantes del candidato conservador Fillon.
El abogado de la pareja no respondió inmediatamente a un mensaje solicitando una respuesta. Fillon ha confirmado que su esposa recibió pagos, pero ha dicho que el trabajo era real. Sus abogados han cuestionado la legitimidad jurídica de la fiscalía financiera.
Fillon está luchando para mantener viva su campaña presidencial.
Las encuestas de opinión indican que desde que explotó el escándalo hace casi tres semanas estaría descolgándose en la carrera, lastrado por la información del semanario satírico Le Canard Enchaine que dijo que su esposa recibió cientos de miles de euros en dinero de los contribuyentes por un trabajo que presuntamente podría no haber desempeñado.
Las encuestas, que antes de que el asunto viera la luz lo situaban como favorito para ganar la presidencia, muestran que el ex primer ministro de 62 años quedaría tercero en la primera vuelta el 23 de abril. En primer lugar se situaría Marine Le Pen del Frente Nacional y segundo sería el centrista Emmanuel Macron, que disputarían una segunda vuelta del 7 de mayo en la que Macron ganaría cómodamente, según los sondeos.
El periódico indica que hay dos rutas posibles para la fiscalía.
La primera sería remitir el caso a un juez de instrucción, cuya función es decidir si una persona o personas deben someterse a una investigación formal.
A veces estos procesos pueden ser presentados contra 'X' - una persona no nombrada, pero en este caso, según el periódico, se nombraría a las partes afectadas.
La segunda vía sería poner el caso directamente ante un tribunal penal. En este escenario, dijo el periódico, los procedimientos podrían comenzar como pronto en un plazo de once días.
En su campaña para representar a su partido, Fillon enfatizó que tenía un expediente judicial limpio y que recortaría en gasto gubernamental. Ha dicho que se retiraría si se le sometiera a una investigación formal en relación con el escándalo del supuesto trabajo ficticio.
Si el Partido Republicano necesita elegir un nuevo candidato, la fecha límite para la recogida de firmas es el 17 de marzo.

El vicepresidente de la CE llama a lograr un acuerdo rápido sobre Grecia

BERLÍN.- El vicepresidente de la Comisión Europea para el Euro y Diálogo Social, Valdis Dombrovski, llamó a lograr un acuerdo rápido sobre el programa de ayudas a Grecia y sobre las reformas en ese país, en declaraciones a un diario alemán.

"No es el momento de volver a los tiempos de inestabilidad financiera", dijo Dombrovski en declaraciones que publica hoy el dominical alemán "Welt am Sonntag".
Y añadió que "las reformas están orientadas a mejorar la competitividad de la economía griega y a darles a los griegos la esperanza de un futuro más estable".
El viernes hubo un encuentro en Bruselas entre las instituciones acreedoras y el ministro de Finanzas griego, Euclides Tsakalotos, para avanzar hacia un acuerdo que permita cerrar la segunda revisión del rescate financiero al país.
Aunque al final de la reunión se habló de "progresos" en las negociaciones de las que depende nuevos desembolsos, todavía no hay un acuerdo cerrado y ante todo hay discusión sobre el papel que tendrá el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el programa.
Por su parte, el vicepresidente del Parlamento Europeo (PE), Dimitrius Papadimoulis, advirtió, también en declaraciones al "Welt am Sonntag", de que nadie puede estar interesado en una situación como la que se presentó en 2015, cuando Grecia estuvo a punto de salir de la eurozona.
"Apelo a todas las partes a ser realistas y a trabajar en una salida positiva", dijo el político griego.
En el gobierno griego hay resistencia ante todo a la postura del FMI,
"Si estuviéramos negociando solo con nuestros socios europeos hubiéramos llegado a un acuerdo sobre la revisión del programa en diciembre", dijo al dominical el viceministro de Exteriores griego, Giorgos Katrougalos.
Alemania, y en especial el ministro de Finanzas Wolfgang Schäuble, consideran indispensable una participación del FMI en el programa de ayuda a Grecia.

Un crudo estable mantendrá el crecimiento de la economía española para 2017

MADRID.- La estabilidad del petróleo -con un barril Brent entre 55 y 60 dólares en 2017- evitará grandes sobresaltos en las previsiones de crecimiento españolas, en un entorno marcado por la incertidumbre ante las políticas de Trump o las dudas sobre Europa, según analistas. 

Las previsiones del Gobierno cifran el aumento del producto interior bruto (PIB) para 2017 en el 2,5 %, si bien el cuadro macro provisional presentado a principios de diciembre se elaboró con el crudo en un precio medio de 50,2 dólares.
Los expertos estiman que la horquilla puede estar algo por encima, apuntan a entre 55 y 60 dólares, aunque subrayan la estabilidad de precios como uno de los elementos más previsibles de un entorno global marcado por la incertidumbre.
En 2017 no se repetirán los precios de 2016 -con el petróleo en mínimos que no se veían desde hace una década- pero tampoco la fuerte volatilidad que terminó con un rally de subidas a raíz, fundamentalmente, del acuerdo de la OPEP en noviembre, según los analistas.
Así, el año pasado, el barril de Brent, de referencia en Europa, se revalorizó más de un 52 %, con mínimos de 27,88 dólares y máximos de 56,82 dólares, mientras que el petróleo estadounidense West Texas se encareció más de un 45 %, y marcó su nivel más bajo del año en los 26,21 dólares y el más alto en los 54,06 dólares.
"El precio del petróleo se mantendrá estable durante 2017", apunta el último informe difundido por Crédito y Caución, que señala que el dinamismo del sector petrolero estadounidense actuará como límite para las subidas, mientras que los compromisos de recortes de producción contendrán las bajadas.
El director de inversiones de Tressis Gestión, Daniel Lacalle, descarta también "grandes shocks" para este año con el petróleo entre 50 y 55 dólares.
"Esos niveles parecen razonables", coincide la gestora principal del fondo de renta variable española Mirabaud Equities Spain, Gemma Hurtado.
También ve el Brent entre los 55 y los 60 dólares el gestor de GVC Gaesco Gestión, Albert Enguix, sin "shocks externos no previstos" e incluso con "una tendencia a la baja".
Y con estas previsiones, difieren algo los impactos en las previsiones económicas para un país fuertemente dependiente de las importaciones energéticas.
Obviamente, señalan, es uno de los factores de desaceleración que ha restado a las previsiones de los próximos años, frente a unos trimestres con unas facturas energéticas excepcionalmente baratas.
Pero, coinciden, con el escenario de precios estables que se dibuja no debería impactar más de lo ya previsto.
Así, Lacalle considera que con el petróleo por debajo de los 60 dólares "no tiene por qué haber un impacto" en el crecimiento de la economía española, que está "preparada para el cambio" en el precio del crudo.
Frente a esto, BBVA -que sitúa el barril en 57 dólares para 2017 y en 58,7 dólares para 2018- advierte de que "el encarecimiento del petróleo podría suponer, en promedio, dos o tres décimas menos de crecimiento durante el bienio 2017-2018".
No obstante, el servicio de estudios del banco ha elevado en su último informe dos décimas su previsión de crecimiento del PIB para este año hasta el 2,7 %, cifra que mantiene para 2018.
Otro debate es el impacto del crudo en la inflación, que en enero se disparó al 3 %, por la luz y los carburantes y registró su tasa más alta desde finales de 2012, y, en consecuencia, las decisiones sobre los tipos de interés.
"La inflación no va a subir más por los precios del petróleo, sino por la demanda interna", apunta Enguix.
Un alza que también ha dirigido la atención hacia el Banco Central Europeo (BCE), que tiene como objetivo alcanzar un nivel de inflación del 2 % en Europa.
Daniel Lacalle afirma que la institución que preside Mario Dragui "ya debería haber tomado acciones" y le insta a ser "más agresivo", en tanto que Albert Enguix menciona las declaraciones de Draghi en las que advierte de que el BCE no subirá tipos hasta 2018.

España gana fuerza en el sistema bancario luso, todavía en reestructuración

LISBOA.- La toma del control del Banco Portugués de Inversiones (BPI) por parte del Caixabank refuerza la posición de España entre los principales actores bancarios de Portugal, donde preocupa la situación del sector financiero, aún pendiente de más reestructuraciones.

La opa ha dejado en manos de los catalanes el 84,5 % del capital del BPI y con ello el control del quinto mayor banco de Portugal, que pasa a estar integrado en el grupo Caixabank, como afirmaron los líderes de ambos bancos en la presentación de los resultados de la opa celebrada en Lisboa.
Aunque mantendrá su marca en Portugal, los medios lusos coinciden en destacar el nombramiento del español Pablo Forero como futuro consejero delegado del BPI, quien se convertirá en el primer extranjero que asume el liderazgo ejecutivo de uno de los grandes bancos del país.
La llamada "españolización" de la banca fue muy criticada en Portugal hace un año, cuando se convirtió casi en un asunto de Estado y economistas, empresarios, políticos y otras autoridades alertaron sobre el peligro que suponía dejar gran parte del sector en manos españolas.
Esta vez parece que la tormenta se ha calmado e incluso el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, aprovechó su visita a Madrid esta semana para asegurar que es "favorable a una presencia fuerte" de España en el sector, siempre que no exista un monopolio.
Con la jugada del Caixabank, los españoles ya controlan más del 27 % de la banca lusa en volumen de activos, según se desprende de los últimos datos aportados por la Asociación Portuguesa de Bancos.
También el cuarto mayor banco del país es español. El Totta, división lusa del Grupo Santander, ganó terreno en Portugal a finales de 2015 cuando compró el Banif, ya integrado totalmente en la entidad española.
Parece que la decisión fue acertada: los resultados del Totta mejoraron más del 35 % en 2016 y fue la división del Grupo Santander que más aumentó sus beneficios el año pasado.
El Santander no piensa en salir de Portugal y la propia Ana Botín acaba de inaugurar un nuevo edificio en Lisboa que aglutinará a la mayoría de sus trabajadores en la capital, en el que ha invertido 28,5 millones de euros.
Además del Caixabank y del Santander, otras entidades españolas también tienen negocio en Portugal, aunque de menor dimensión.
Bankinter desembarcó en suelo luso en 2015 con la compra de las 84 sucursales de Barclays y ya ha expresado su intención de apostar por este mercado, que espera que represente el 10 % del ingreso total del grupo en dos años, según desveló en enero la consejera delegada, María Dolores Dancausa.
En dirección contraria van el BBVA y el Banco Popular, ambos inmersos en un proceso de reestructuración que reducirá su presencia en suelo luso.
El BBVA apenas cuenta con 14 oficinas, según su web, y enfocó su actividad hacia el sector empresarial y la banca digital.
Por su parte, el Popular anunció recientemente que su división lusa se convertirá en una sucursal de la entidad española, además de cerrar casi medio centenar de oficinas y recortar unos 300 empleados como parte de la reestructuración que afecta a todo el grupo.
Además, el Banco Sabadell vendió en diciembre la posición del 5 % del capital que mantenía en el Banco Comercial Portugués (BCP), principal entidad privada del país.
Los últimos grandes movimientos han configurado el mapa actual del sistema bancario luso: una gran entidad pública de capital 100 % portugués, la Caixa Geral de Depósitos (CGD); un BCP donde chinos y angoleños se dividen el poder; dos bancos controlados por españoles (BPI y Totta), y el Novo Banco, cuyo futuro está en el aire.
La situación del Novo Banco sigue siendo la principal incógnita de un sector que todavía no ha concluido su reestructuración.
Las autoridades siguen negociando con los dos candidatos -Lone Star y el consorcio Centerbridge/Apollo, todos estadounidenses-, pero la concesión de una garantía estatal para proteger al futuro dueño sigue bloqueando el proceso y la nacionalización se postula como alternativa.
La CGD no ha concluido todavía una recapitalización que ronda los 5.000 millones de euros y está bajo una reestructuración que prevé la salida de 2.200 empleados y la posible venta de su negocio en España, Brasil y Sudáfrica, mientras que el propio BPI tiene que cerrar aún medio centenar de oficinas y recortar 900 trabajadores.
Queda pendiente también una solución para el elevado nivel de crédito moroso de todo el sector, para lo que se estudia la creación de una especie de "banco malo".

Europa busca solución a los residuos que genera el turismo en las islas del Mediterráneo

BARCELONA.- Un estudio europeo en el que participa el Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales (ICTA) de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) analizará y propondrá soluciones a los efectos del incremento de los residuos generados por el turismo durante el verano en las islas del Mediterráneo.

La región mediterránea es el principal destino turístico del mundo y sus islas reciben un gran volumen de población durante los meses de verano.
Según ha explicado la investigadora del ICTA-UAB, Patrizia Ziveri, las economías locales dependen en gran medida del turismo como fuente de ingresos y como generador de empleo, pero esta ola turística anual masiva, concentrada en un corto periodo de tiempo, supone una gran carga para las infraestructuras, especialmente para aquellas relacionadas con la gestión de los residuos.
Por eso, las autoridades locales buscan cómo hacer frente tanto al elevado incremento de la generación de residuos como al bajo nivel de clasificación de los desechos por parte de los turistas.
El proyecto europeo Interreg MED BlueIslands trabajará durante tres años, hasta 2019, para desarrollar y elaborar sistemas eficaces, económicamente viables y ambientalmente sostenibles que permitan abordar y mitigar las consecuencias de este incremento estacional de residuos generados por el turismo en nueve islas de la Mediterráneo.
Subvencionado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional y dirigido por el Ministerio de Agricultura, Desarrollo Rural y Medio Ambiente de Chipre, el estudio se llevará a cabo en las islas de Mallorca (España), Cerdeña y Sicilia (Italia), Malta, Rab (Croacia), Creta, Rodas y Mykonos (Grecia) y Chipre.
El proyecto, que cuenta con 14 instituciones socias de toda Europa, cuantificará los residuos generados en las islas durante la temporada turística alta y fuera de ella, evaluará la composición de los residuos, el impacto de la basura en las costas y playas, y su influencia en las instalaciones de tratamiento de aguas residuales.
Patrizia Ziveri ha señalado que "aunque se trata de un fenómeno bien conocido, la variación estacional de la generación de residuos en las islas aún no se ha definido correctamente ni se ha determinado su efecto socioeconómico y medioambiental".
Según la investigadora, "el aislamiento y la falta de espacio para crear instalaciones suponen una limitación adicional para estas islas".
El proyecto BlueIslands tiene como objetivo proporcionar respuestas a todas estas preocupaciones.
Entre otras cosas, el ICTA-UAB, en colaboración con otras 13 instituciones europeas socias del proyecto, evaluará la dinámica de los micro y macro-plásticos en las zonas costeras más turísticas.
Durante este año se llevará a cabo el monitoreo de 27 playas de forma periódica y los investigadores harán 189 encuestas para mostrar la acumulación de basura marina en relación con las actividades turísticas de las playas seleccionadas.
Los investigadores cogerán y analizarán en el ICTA-UAB alrededor de 700 muestras para evaluar las concentraciones de micro y macro plásticos tanto en tierra como en el mar.
Según Ziveri, en base a los resultados, planificarán diferentes estrategias y crearán e implementarán una herramienta multidimensional y diferentes planes de acción.
Después de aplicar estas medidas, repetirán las encuestas para evaluar sus impactos.

Libia inaugura una nueva plataforma marítima de extracción de petróleo

TRÍPOLI.- La petrolera italiana ENI y la Compañía Nacional Petrolera (NOC) libia estrenaron una nueva plataforma marítima de explotación y carga de petróleo situada a escasos kilómetros de la costa.

Así lo reveló hoy la propia compañía petrolera libia en un comunicado en el que explicó que la plataforma comenzó a ser instalada en mayo pasado y reveló que la primera carga de crudo se realizó el sábado.
La plataforma, fabricada por una empresa surcoreana y situada en el yacimiento de Al Bouri, sustituye a una vieja instalación italiana y será explotada por la compañía Mellitah de petróleo y gas, participada por ENI y NOC.
Libia trata de resucitar su industria petrolera, que antes de la revolución de 2011 producía cerca de 1,6 millones de barriles de crudo diario y que seis años después de la caída de la dictadura de Muamar al Gadafi apenas llega a 700.000.