MADRID.- La agencia de calificación de riesgo Fitch ha mantenido hoy la nota de España en un aprobado alto (BBB+), pero ha mejorado la perspectiva de estable a positiva, lo que abre la puerta a una subida de nota en futuras revisiones.
Fitch
justifica el cambio de perspectiva en la buena evolución de la
economía, cuya recuperación sigue siendo sólida, y de la creación de
empleo, lo que le ha llevado a elevar su previsión de crecimiento para
este año hasta el 3,1 %.
Se trata del
segundo informe publicado por la agencia en 2017, después de que el
pasado 21 de enero confirmara la calificación y la perspectiva del país.
A juicio de la agencia, España sigue haciendo progresos en la reducción de los desequilibrios macroeconómicos,
ya que mantiene la senda de desendeudamiento, sobre todo del sector
privado, y el dinamismo del mercado laboral, gracias a las reformas
estructurales acometidas.
Fitch prevé para 2017 una mayor
inversión privada que permitirá contrarrestar el efecto que sobre el
consumo tendrá una política fiscal neutra y el repunte de la inflación.
Para 2018 y 2019 espera una moderación del crecimiento hasta el 2,5 % y el 2,2 %, respectivamente.
La
agencia espera que el déficit público se reduzca en mayor medida que en
ejercicios anteriores gracias al favorable ciclo económico y pronostica
que baje al 3,2 % del PIB en 2017 (una décima más de lo comprometido
con Bruselas) y al 2,5 % en 2018 (tres décimas por encima).
Dos tercios de la reducción del déficit en 2017
vendrán por el lado del gasto, en tanto que las medidas adoptadas a
finales de 2016 por el lado de los ingresos (aumento de los pagos
adelantados y de las bases imponibles del impuesto de sociedades)
permitirán un aumento de cuatro décimas de PIB en la recaudación.
En el plano político, Fitch contempla que la tensión con Cataluña crezca en los próximos meses sin
que eso derive en cambios significativos para la economía española, y
duda de que la consulta independentista vaya a celebrarse, lo que cree
que traerá consigo un adelanto de las elecciones autonómicas.
A
más largo plazo, la agencia asume que terminará habiendo un acuerdo con
Cataluña que dará más autonomía a esta comunidad dentro de España,
aunque reconoce que esta negociación será un reto.
Por
otra parte, considera que el hecho de que el Gobierno haya sacado
adelante los presupuestos de 2017 y el techo de gasto de 2018 no despeja
la incertidumbre respecto a si se podrán aprobar unos presupuestos para
el año próximo.
Fitch
asegura que las posibilidades de que el Gobierno encuentre apoyo en el
PSOE son ahora menores, por lo que no cree que se puedan emprender
reformas económicas sustanciales, sino solo "proteger" las reformas
anteriores con la adopción de nuevas medidas de carácter limitado.
Del sector bancario destaca una mejora de la morosidad
y los activos tóxicos ligados al sector inmobiliario, al tiempo que
asegura que la resolución del Banco Popular no ha afectado a su visión
del sector, que tiene por delante el reto de mejorar la calidad de sus
activos, aumentar sus márgenes en un entorno de tipos bajos y adaptarse a
los nuevos requerimientos regulatorios.