PARÍS.- Francia urgió este jueves a alcanzar un acuerdo rápido sobre cómo afrontar la elevada deuda griega, asunto que divide a sus acreedores europeos y al FMI, antes de una serie de elecciones cruciales en Europa que podrían afectar aún más las discusiones.
"La ventana de oportunidad está aún
abierta, pero se cerrará dentro de poco porque hay citas electorales",
aseguró el ministro francés de Finanzas, Michel Sapin, en referencia a
los comicios previstos en Holanda en marzo, en Francia entre mayo y
junio y en Alemania en septiembre.
Los acreedores
europeos de Grecia quieren la participación del Fondo Monetario
Internacional en el actual tercer plan de ayuda de 86.000 millones de
euros a este país del sur de Europa, que cuenta con el mayor número de
desempleados de la zona euro, un 23,1% (cifras de septiembre).
No
obstante, la institución monetaria, que desempeñó un importante papel
en los dos precedentes planes de ayuda, se muestra reticente si no se
produce una reestructuración drástica de una deuda griega que, tras seis
años de duras reformas, alcanza el 176,9% del PIB, unos 311.000
millones de euros.
El presidente del Eurogrupo, Jeroen
Dijsselbloem, que reafirmó su confianza en la participación del FMI en
el actual programa de rescate en su "totalidad", explicó que la
institución dirigida por Christine Lagarde quiere "reformas creíbles,
objetivos fiscales realizables" y una deuda "sostenible".
El
FMI reclama además que Atenas modifique ahora su legislación para
aplicar más reformas, si a partir de 2018, cuando expira el tercer plan
de rescate, no se alcanza el compromiso de un excedente primario
(excluyendo los intereses de la deuda) del 3,5%, algo que el gobierno
griego considera antidemocrático.
"No es correcto pedir a
un país (...) que legisle dos o tres años antes lo que haría en 2018.
Es un compromiso que va mucho más allá del marco europeo de la
democracia", aseguró el ministro griego de Finanzas, Euclides
Tsakalotos, al término de una reunión del Eurogrupo.
Tras
reunirse con Tsakalotos antes de la reunión del Eurogrupo, el ministro
de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäuble, que rechaza una
reestructuración de la deuda griega, urgió a Atenas a aplicar las
reformas a las que se comprometió para poder avanzar en el programa de
rescate.
Pese al llamado de Francia, un responsable de la
zona euro estimó irrealizable un acuerdo rápido. "Será difícil de
conseguir en el próximo Eurogrupo" previsto en febrero salir del punto
muerto, aseguró