KIEV.- Salvador Sobral, un joven de la nobleza portuguesa, ha dejado esta noche a media Europa sin palabras y llena de emoción. Primero por su delicadeza a la hora de interpretar la canción que representaba a Portugal en Eurovisión 2017 y que lleva por título Amar pelos dois. Y segundo porque su delicado estado de salud no le ha permitido ni realizar siquiera los ensayos como estaban previstos inicialmente.
Este joven estudiante de psicología deportiva de 28 años, cuya pasión es la música, recaló en el el Taller dels Músics de Barcelona pero
también se ha formado en Estados Unidos y los expertos aseguran que su
puesta en escena, sencilla y sin ningún tipo de artificios, es lo que le
confiere la grandeza que Portugal ansía en Eurovisión desde hace años.
Salvador Sobral conquista Europa con 'Amar Pelos Dois', un buen tema que merece los honores, y ha ganado el festival de festivales con su voz y una canción de su hermana Luisa, quien le apuntó al Festival de la Canción, organizado por la Radio Televisión Portuguesa (RTP). Allí ganó con Amar pelos dois.
Su hermana le obligó a que interpretara siempre de la misma forma Amar pelos dois, al menos hasta que pasara Eurovisión.
"Es una canción que no me compromete como artista; bonita, sencilla, que
podría interpretar en mis actuaciones o incluir en mis discos".
"Soy el vehículo emocional de la canción. No solo la voz o la música,
también los movimientos corporales ayudan a transmitir y a comunicar con
el público", explicaba a RTP tras ganar el festival portugués.
Sobral es un cantante de jazz que solo el pasado año publicó su primer disco, Escuse me, casi todo en inglés y español.
"El jazz es como la vida, un diálogo, una conversación constante, en
lugar de entre personas, entre instrumentos; y, como la vida, tiene
constantes sorpresas", según ha dicho.
«No me gusta la música fast-food sin objetivo, mis canciones deben tener un significado, canto con mi corazón», declaraba Sobral poco antes del concurso.
Tras su barba rala y su coleta, el joven miembro de la burguesía de Lisboa esconde cierta fragilidad, simbolizada por una voz suave y trémula, y causada por sus graves problemas cardíacos que lo obligan a ir al médico al menos una vez cada 15 días.
Ahora Salvador espera con urgencia un trasplante de corazón si quiere seguir viviendo porque está en la lista de espera del sistema sanitario portugués aguardando una ansiada intervención. Pero el tiempo juega a su contra."Necesita un donante de manera urgente. No tiene mucho tiempo, como mucho un año", dicen sus allegados.
"Salvador está obligado a llevar continuamente una especie de marcapasos que le obliga igualmente a usar una mochila con pilas alrededor de la cintura", afirma otra fuente familiar. Y es que vive conectado a una máquina que mantiene estables los latidos de su corazón.
El portugués Salvador Sobral abandonó su país en el 2011 con destino a Mallorca. Lo hizo con una beca Erasmus, con la clara intención de pulir su formación en Psicología. El problema es que la noche balear le confundió, y como el mismo reconoció, acabó pisando poco la Facultad y atiborrándose de setas alucinógenas y otras drogas.
Se rehizo poco a poco y comenzó a actuar cantando en los bares y hoteles de Mallorca. «Era difícil cantar todas las noches hasta las doce, pero merecía la pena. Pensaba quedarme en la isla, pero cuando vi que ahí no pasaba nada en invierno, entendí que tenía que tomar una decisión», contaba antes de viajar a Kiev, la ciudad en la que se celebró esta edición del concurso musical.
Viajó entonces a Barcelona para estudiar jazz y perfeccionar su voz. En la ciudad catalana descubrió las composiciones del trompetista y cantante Chet Baker, que se convirtió en su mayor inspiración.
«Mi enfermedad, aunque no se puede curar totalmente, es un pequeño problema en realidad, seguramente el único que tengo en la vida», decía antes de viajar a Ucrania el cantante que, según la prensa portuguesa, sigue a la espera de un trasplante de corazón.
Hace unas semanas Sobral era un auténtico desconocido en espera de ese trasplante algo urgente, que ya tiene en vilo a los miles de seguidores que ha sumado esta noche en toda Europa.
«No me gusta la música fast-food sin objetivo, mis canciones deben tener un significado, canto con mi corazón», declaraba Sobral poco antes del concurso.
Tras su barba rala y su coleta, el joven miembro de la burguesía de Lisboa esconde cierta fragilidad, simbolizada por una voz suave y trémula, y causada por sus graves problemas cardíacos que lo obligan a ir al médico al menos una vez cada 15 días.
Ahora Salvador espera con urgencia un trasplante de corazón si quiere seguir viviendo porque está en la lista de espera del sistema sanitario portugués aguardando una ansiada intervención. Pero el tiempo juega a su contra."Necesita un donante de manera urgente. No tiene mucho tiempo, como mucho un año", dicen sus allegados.
"Salvador está obligado a llevar continuamente una especie de marcapasos que le obliga igualmente a usar una mochila con pilas alrededor de la cintura", afirma otra fuente familiar. Y es que vive conectado a una máquina que mantiene estables los latidos de su corazón.
El portugués Salvador Sobral abandonó su país en el 2011 con destino a Mallorca. Lo hizo con una beca Erasmus, con la clara intención de pulir su formación en Psicología. El problema es que la noche balear le confundió, y como el mismo reconoció, acabó pisando poco la Facultad y atiborrándose de setas alucinógenas y otras drogas.
Se rehizo poco a poco y comenzó a actuar cantando en los bares y hoteles de Mallorca. «Era difícil cantar todas las noches hasta las doce, pero merecía la pena. Pensaba quedarme en la isla, pero cuando vi que ahí no pasaba nada en invierno, entendí que tenía que tomar una decisión», contaba antes de viajar a Kiev, la ciudad en la que se celebró esta edición del concurso musical.
Viajó entonces a Barcelona para estudiar jazz y perfeccionar su voz. En la ciudad catalana descubrió las composiciones del trompetista y cantante Chet Baker, que se convirtió en su mayor inspiración.
«Mi enfermedad, aunque no se puede curar totalmente, es un pequeño problema en realidad, seguramente el único que tengo en la vida», decía antes de viajar a Ucrania el cantante que, según la prensa portuguesa, sigue a la espera de un trasplante de corazón.
Hace unas semanas Sobral era un auténtico desconocido en espera de ese trasplante algo urgente, que ya tiene en vilo a los miles de seguidores que ha sumado esta noche en toda Europa.
Amar Por Los Dos
Sí un día alguien pregunta por mi
Di que viví para amarte
Antes de ti, sólo existí
Cansado y sin nada para dar
Cariño, escucha mis plegarias
Pido que regreses, que me vuelvas a querer
Sé que no se ama solo
Tal vez poco a poco vuelvas a aprender
Cariño, escucha mis plegarias
Pido que regreses, que me vuelvas a querer
Sé que no se ama solo
Tal vez poco a poco vuelvas a aprender
Si tu corazón no quiere ceder
No sentir la pasión, si no quiere sufrir
Sin planear lo que vendrá después
Mi corazón puede amar por los dos
http://www.rtve.es/alacarta/videos/eurovision-2017/eurovision-2017-portugal-salvador-sobral-canta-amar-pelos-dois/4018697/
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