LISBOA.- El gobierno portugués
otorgó una ayuda por un millón de euros a los pescadores de sardinas,
para compensar la suspensión de la captura de esta especie durante dos
meses, anunció este martes el Ministerio del Mar.
Esta
decisión se enmarca en el programa para preservar las especies marinas y
hacer respetar las cuotas de pesca de sardina, con el objetivo de
luchar contra su disminución en las aguas ibéricas.
Para
finales de diciembre, este pago se había efectuado a pescadores y
armadores de 46 barcos pesqueros portugueses. Cada pescador debe recibir
una ayuda máxima de 1.920 euros.
Víctima
de la sobrepesca, la sardina ibérica es objeto de un plan de gestión
desde 2012 para que sus reservas, históricamente bajas, puedan
renovarse.
En 2016, Portugal y España tenían una cuota de
pesca de sardinas conjunta de 17.000 toneladas, unas 2.000 toneladas
menos que el año anterior.
La destinada a Portugal, de 11.500 toneladas, fue alcanzada a mediados de octubre, lo que provocó la suspensión de la pesca.
Se
trata de una mala noticia para los portugueses, los mayores
consumidores de pescado en Europa, con un promedio anual de 56 kilos por
persona.
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