Infraestructura y energía, grandes oportunidades de inversión española en Filipinas

DAVAO.- El desarrollo de infraestructuras y de fuentes de energía renovables son dos de las grandes oportunidades de inversión para España en Filipinas, según identificaron hoy empresarios y funcionarios de ambos países en la ciudad filipina de Davao (sur).

"Filipinas es una zona que tiene una importancia estratégica importantísima y que además tiene un déficit de infraestructuras", señaló Francisco Moreno, de la compañía constructora española OHL, que participó en la octava edición de la Tribuna España-Filipinas, que se celebró ayer y hoy.

"Hay una oportunidad y un campo tremendo en Filipinas", destacó este empresario que cree que el país asiático es una buena alternativa para España, nación que además tiene ya prácticamente todas sus infraestructuras construidas.

Por su parte, el filipino Karim García, de la compañía Metro Pacific Investment Corp., confirmó que necesitan "carreteras, aeropuertos, ferrocarriles y muchas infraestructuras más".

"Especialmente en el Área Metropolitana de Manila, donde tenemos muchísimo tráfico y deberíamos empezar a construir sistemas de transporte público subterráneo", explicó García, que recordó que España tiene varias empresas expertas en la construcción de túneles.

El representante de Metro Pacific indicó que para favorecer la inversión extranjera el Gobierno debe fomentar "un ambiente de estabilidad en el que se respeten los contratos ya firmados".

García también indicó que Filipinas necesita una variedad de fuentes de energía, que actualmente se obtiene en gran parte de plantas de carbón y yacimientos de gas.

"En 2023 o 2024, nuestro campo de gas de Malampaya se va a agotar, ¿vamos a seguir usando carbón o vamos a ser inteligentes y empezar a diversificar?", planteó el filipino, que animó a su país a apostar por fuentes de energía renovables en las que se especializan varias compañías españolas.

Solarig es una de estas empresas, y su representante, José Ignacio Hualde, trabaja en el desarrollo de proyectos de energía solar en Filipinas desde 1997.

"Hay mucho negocio en Filipinas y muchas cosas por hacer. Los dos países compartimos los mismos principios, las mismas creencias, le damos importancia a las mismas cosas", dijo Hualde.

"No es fácil entrar en Filipinas, pero hay que tener paciencia, se puede hacer", manifestó el español, quien destacó que muchas zonas del archipiélago filipino aun no cuentan con una fuente de electricidad.

Según Hualde, el impacto de las inversiones de empresas energéticas españolas en Filipinas es notable y ha mejorado la calidad de vida de los habitantes de la zona de manera excepcional.

La instalación de 1.000 farolas en las calles de varias poblaciones de la isla de Mindanao (sur), una de las regiones más empobrecidas de Filipinas, "ha permitido el desarrollo del comercio, ya que los puestos que se suelen situar al lado de las carreteras podían abrir hasta más tarde".

"También ha llevado a la reducción drástica de la tasa del crimen", explicó Hualde.

Además de oportunidades en infraestructuras y energía en Filipinas, los asistentes al foro hispano-filipino conversaron sobre la posibilidad de incrementar el comercio bilateral de productos agrícolas, así como fomentar el turismo y el castellano en el archipiélago asiático.

La octava edición de la Tribuna España-Filipinas, organizada por Casa Asia (España), la Fundación Santiago y el Consejo de Negocios Filipino-Español, contó con la presencia del ministro de Economía de Filipinas, Carlos Domínguez, y el secretario de Estado de Asuntos Exteriores de España, Ignacio Ybañez.

Asimismo, acudieron al evento el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Filipinas, George Barcelon; el presidente del Consejo de Negocios Filipino-Español, Jose Leviste; el director general de la Casa Asia, Ramón María Moreno, y el embajador de España en Manila, Luis Calvo.

La Tribuna España-Filipinas, celebrada por primera vez en 2005, tiene lugar en España y Filipinas de forma alternativa y su objetivo principal es potenciar las relaciones bilaterales, especialmente en el ámbito económico, pero también en el político y cultural.