Frase más o
menos textual, traducida del original, de la portavoz del
Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova: ‘España está amenazada
por el terrorismo internacional, pero por alguna razón la OTAN
considera que no se debe defender de esa amenaza y prefiere
ocuparse de amenazas virtuales inexistentes, lo que sería hasta
gracioso si no fuera porque es realmente peligroso’. Zajàrova acaba
de decir en Madrid todo eso. Y algo más.
La
pizpireta portavoz ya era famosa para los corresponsales extranjeros en
Moscú antes de saltar al estrellato el año pasado al bailar con estilo
al ritmo de ‘Kalinka’ en una gala durante la reunión de ASEAN en Sochi.
Desde entonces hasta cultiva con desparpajo y soltura su relativo
parecido con Federica Mogherini, la jefa de la diplomacia europea.
Pero Zajárova es más agresiva, a juzgar por lo que ha soltado en
Madrid durante una visita en principio discreta pero que ha saltado a la
prensa internacional por los líos de Trump, Putin y demás. Su presencia
en la capital española la relacionan medios rusos como Tass, Sputnik y
Russia Today con los preparativos para la próxima visita a Moscú el 6 y 7
de junio del ministro español de Exteriores, Alfonso Dastis.
Pero hay algo más. Este tipo de visitas se negocian normalmente a
través de las embajadas respectivas, si no hay circunstancias
extraordinarias. Que es exactamente lo que parece preocupar o al menos
interesar en Moscú: Zajárova ha hablado y escrito de lo lindo en Madrid
tanto sobre Siria, terrorismo, espionaje cibernético y OTAN como sobre
la vinculación Trump-Putin, el periodismo norteamericano y el Guernica.
De todo eso ha hablado Zajárova en Madrid con periodistas
mayoritariamente rusos. También ha dado una entrevista a Manuel Trillo
que publica la web de ABC este jueves y en la que, entre otras muchas
cosas, se queja diplomáticamente de la presencia de aviones F-18
españoles en Estonia, frontera con Rusia. No se queja, en cambio, de las
violaciones desde hace años de cazas rusos del espacio aéreo de unos
cuantos países de la OTAN, incluido el Reino Unido y la propia España.
Una de las quejas de Zajárova en su visita madrileña, según la
refleja Sputnik: ‘El espacio informativo europeo se encuentra
influenciado por medios estadounidenses cuyas informaciones no cumplen
unos requisitos mínimos de veracidad’. Otra reflexión, de acuerdo con la
versión del la iraní HispanTV: ‘¿Alguna vez en la historia España ha
tenido que defenderse de los rusos? No sólo nunca han sido enemigos,
sino que lo mismo que ocurre con el terrorismo internacional, en
diferentes épocas han compartido enemigos’.
La portavoz rusa de Exteriores no sólo ha hablado ‘en’ Madrid.
También lo ha hecho ‘desde’ Madrid. En concreto, sobre el monumental
caos que se ha montado en EEUU en relación con la llamada ‘conexión
rusa’ de Trump en torno a la supuesta injerencia del Kremlin en las
elecciones norteamericanas.
Es un escándalo creciente tras la destitución del director del FBI
James Comey, la revelación de que antes le pidió que cerrara la
investigación sobre Rusia y la filtración de que le pasó al jefe de
Zajárova información confidencial sobre terrorismo. Una bola de nieve
que ha llevado ya a pedirse hasta el ‘impeachment’ o proceso político
para destituir a Trump y que de momento ha alcanzado un nivel parecido a
Watergate con el nombramiento de un fiscal instructor independiente:
Robert Mueller, otro antiguo director del FBI.
El jefe de Zajárova es Seguéi Lavrov, el ministro ruso de Exteriores.
La portavoz se ha quejado en Madrid y en Facebook de la prensa
norteamericana, a la que acusa de hacer lo que sea para publicar
‘noticias falsas’, tan de moda últimamente. Pero es que las primicias un
día sí y otro también de diferentes medios consagrados está demoliendo
la presidencia de Trump.
O sea, que ahora resulta que el Gobierno de Putin es el máximo
defensor del presidente de EEUU. El mundo al revés. Esto es lo que
escribió María Zajárova en Facebook: ‘Acabo de aterrizar en Madrid en
visita de trabajo. Miré el teléfono y había docenas de mensajes de este
tenor: ‘¿María Vladimirodna, es verdad que Trump reveló secretos
importantes?’.
La visita a Madrid ha sido con bastante sigilo. Pero es que el viaje
de Lavrov a Washington no fue menos misterioso. Tal como lo ha contado
The Washington Post, el pasado 2 de mayo el mismo Putin llamó a Trump y
le dijo que tenía ‘nuevas ideas’ sobre cómo acabar con la guerra civil
en Siria. Y le recordó que Lavrov se iba a ver con el secretario
norteamericano de Estado, Rex Tillerson, dentro de pocos días.
¿Le podrás recibir?’, le preguntó directamente el jefe del Kremlin al
jefe del Pentágono. ‘Sí’, respondió Trump. No podía hacer otra cosa:
Putin había acogido durante dos horas a Tillerson no hacía mucho tiempo,
y otra cosa habría sido un desaire. De modo que se concertó la fatídica
cita en la Casa Blanca en la que presuntamente Trump pasó secretos a
los rusos y además no permitió la presencia de periodistas
norteamericanos.
Problema: no es que Lavrov iba a verse con Tillerson en Washington.
Era un poco más allá, en Fairbanks, Alaska: a unos 6.000 kilómetros, no
mucho menos que la distancia entre Madrid y la capital norteamericana.
Pero todo se organizó para que tuviera lugar la reunión que, junto con
otros disparates, podría ser eventualmente el principio del fin de la
presidencia de Trump.
(*) Periodista español
No hay comentarios:
Publicar un comentario