ANKARA.- La debilidad de la divisa de Turquía
podría trastocar las previsiones económicas realizadas para el primer
trimestre de 2017, según explicó hoy el gobernador del Banco Central en
esta capital, Murat Cetinkaya.
Aunque el impacto de la depreciación de la lira hasta ahora fue limitado, Cetinkaya reconoció el riesgo de que en los próximos meses los precios comiencen una tendencia alcista si no se consigue que la economía crezca a buen ritmo.
Para el responsable de la institución, ambas variables, demanda interna y fortaleza económica, serán fundamentales para estabilizar la moneda nacional.
Durante las últimas semanas la lira marcó en diversas ocasiones mínimos históricos de cotización, sin que el aumento de los tipos de interés decretado por el Banco Central ayudara a corregir la tendencia.
Cetinkaya confió en un repunte de la actividad económica en el último trimestre de este año, pero también un riesgo alcista en la inflación, para la que pronóstico una tasa del 7,5 por ciento para finales de 2016, debido principalmente a las subidas de impuestos sobre el tabaco y otros productos.
De cara al próximo ejercicio, el gobernador previó un crecimiento de las exportaciones y consideró que la normalización de las relaciones con Rusia tendrá un impacto positivo.
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