PARÍS.- Los diputados franceses aprobaron hoy la privatización prevista de dos
empresas de capital mayoritariamente estatal, Aeropuertos de París (ADP)
y el grupo de lotería FDJ, una operación que estaba bloqueada por la
legislación en vigor.
La Asamblea aprobó los artículos 44 a 52 de la llamada
ley PACTE, que autorizan al Estado a bajar del 50 % en ADP y FDJ
(Française des Jeux), pero también a disminuir su participación en el
grupo energético Engie por debajo de un tercio el capital.
Esos artículos fueron adoptados gracias a la mayoría
que apoya al presidente, Emmanuel Macron, mientras que votaron en contra
la oposición tanto de izquierdas como de derechas.
El dinero obtenido con los paquetes de acciones que se pongan a la venta
servirá para crear un nuevo Fondo para la Innovación y la Industria,
que el Gobierno ha decidido dotar de 10.000 millones de euros.
En un comunicado, el Ministerio de Economía y Finanzas -que no ha
fijado un calendario para todas esas operaciones- recordó que ese dinero
financiará tecnologías de futuro como la inteligencia artificial, la
nanoelectrónica o el almacenamiento de energía, con el objetivo de
obtener un rendimiento de 250 millones de euros anuales.
En el caso de ADP, los artículos adoptados hoy de la ley PACTE -que
debe continuar su tramitación en el Senado- modifican su régimen
jurídico para permitir una privatización asociada a una concesión de 70
años, al cabo de los cuales el control de todos los bienes (como
terminales o pistas), volvería al Estado.
Además,
las autoridades públicas conservarán un poder de autorización de las
inversiones, las obras y los cambios en el control de la empresa, que
gestiona las plataformas de Charles de Gaulle, Orly y Le Bourget.
En el caso de FDJ, la ambición declarada de su privatización -el
Estado seguirá en su capital como accionista minoritario- es que siga
siendo "un líder europeo frente a una competencia que se ha hecho
múltiple".
Su regulación se va a reforzar con una
nueva autoridad independiente para garantizar la lucha contra la
adicción al juego, las apuestas de los menores, el fraude y el blanqueo
de dinero.
En el caso de Engie -siempre según el
Ministerio de Economía-, se trata de dar al Gobierno "flexibilidad"
sobre el nivel de participación pública y su capacidad para aumentar su
capital para "financiar proyectos industriales estratégicos".
No hay comentarios:
Publicar un comentario