jueves, 12 de enero de 2017

Salario, trabajo y terrorismo centran el debate de la izquierda en Francia

PARÍS.- El salario, las cuestiones laborales y la lucha contra el terrorismo centraron hoy la atención en el primer debate de los candidatos a las primarias de la izquierda en Francia, previas a las elecciones presidenciales.

En el primero de tres debates previstos antes de la primera vuelta de las primarias, comparecieron cuatro representantes del gubernamental partido Socialista (PS): el ex primer ministro Manuel Valls, y los exministros Arnaud Montebourg, Benoit Hamon y Vincent Peillon.

También intervinieron la presidenta del Partido Radical de Izquierda, Sylvia Pinel; el ecologista François de Rugy, y el líder del Frente Democrático, Jean-Luc Bennahmias.

Aunque en este proceso eleccionario sobresale la ausencia del presidente François Hollande, quien renunció a la reelección, las alusiones a su figura fueron constantes con muchos más elogios de lo esperado, pues previo al debate los analistas vaticinaban un posible juicio contra el balance de su quinquenio.

Entre los aspectos más alabados, incluso por los aspirantes de otros partidos, sobresalió el enfrentamiento a las situaciones de emergencia vividas en Francia a raíz de los varios antenados terroristas en los dos últimos años.

No obstante, también hubo reproches como una crítica casi general a la Ley del Trabajo aprobada de forma forzada hace pocos meses por el Gobierno socialista, por considerar que lleva a los trabajadores a una situación muy vulnerable.

Mientras Valls (primer ministro que impulsó la ley) intentó defender los puntos positivos de la normativa, la mayor parte de los candidatos aseguraron que de ser electos presidentes, derogarían totalmente esa legislación.

Precisamente los temas laborales ocuparon buena parte del tiempo del debate, con una atención especial al salario y a las propuestas de los diferentes candidatos para aumentar el poder adquisitivo de los hogares franceses y garantizar una protección a los ciudadanos de menor remuneración.

Varios de los políticos se mostraron muy críticos con algunas propuestas del candidato presidencial de la derecha, François Fillon, y particularmente con su intención de suprimir miles de puestos de funcionarios públicos.

De acuerdo con los aspirantes de izquierda y ecologistas, ello fragilizaría los servicios sociales y públicos en sectores clave como salud.

Respecto al enfrentamiento al terrorismo, los aspirantes estimaron necesario fortalecer la seguridad interna en Francia y también a nivel regional, por lo que defendieron la necesidad de una mayor coordinación europea en este ámbito.

El debate sobresalió por un ambiente de armonía entre los candidatos, casi sin ataques entre ellos, mientras se evidenció la aspiración en todos de aprovechar su tiempo para dar a conocer sus propuestas ante los franceses.

Aunque algunos sondeos ubican a Valls y a Montebourg como los favoritos, otros candidatos defendieron que todavía no hay nada definido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario